Las reseñas destacan la atmósfera auténtica y tranquila del alojamiento, situado en la isla de San Nicola. El apartamento es pequeño, pero acogedor y bien equipado, ideal principalmente para parejas. Los viajeros valoran mucho la limpieza, la funcionalidad y la amabilidad de los anfitriones. Los espacios exteriores con mesa y sofás son muy apreciados para el descanso. Aunque la isla carece de comercios y servicios, es perfecta para quienes buscan una experiencia sencilla, pausada y cercana al mar, lejos del ritmo acelerado de la vida cotidiana.