Las opiniones destacan la limpieza y la modernidad del alojamiento, recientemente renovado y funcional. La ubicación céntrica y la proximidad a la estación y al metro resultan muy prácticas para moverse por la ciudad. El trato del anfitrión se valora positivamente por su disponibilidad y gestión. Entre los inconvenientes aparecen el ruido, ya que se encuentra en la planta baja de un edificio concurrido, y la falta de privacidad en algunas habitaciones. También se han señalado pequeños problemas de humedad y molestias acústicas. La relación calidad-precio se considera satisfactoria.