Las opiniones destacan una estructura de estilo antiguo, bien cuidada y muy limpia, con un bonito jardín privado y habitaciones espaciosas. El personal y la anfitriona reciben elogios por su trato cordial y disponibilidad. La ubicación es apreciada por su proximidad tanto a las pistas de esquí como al centro, y es ideal para explorar el Gran Sasso, Campo Imperatore y L’Aquila. Los huéspedes consideran que la relación calidad/precio es muy buena y la recomiendan también para familias.