Las opiniones de los viajeros destacan principalmente la ubicación estratégica del alojamiento, justo frente a la estación Termini y cerca del metro, lo que facilita moverse por Roma. Se valora mucho la limpieza, el confort de las habitaciones (aire acondicionado, insonorización, camas cómodas) y la modernidad de las instalaciones. La anfitriona, Valentina, recibe elogios por su amabilidad y atención. La relación calidad-precio es considerada muy buena. Algunos mencionan cierto ruido exterior debido a la estación, aunque la insonorización suele ser suficiente. Se aprecian servicios adicionales como la posibilidad de dejar el equipaje y zonas comunes con frigorífico o cafetera. En general, un alojamiento moderno y práctico para una estancia en Roma.