Las opiniones destacan la limpieza impecable, el ambiente elegante y el trato acogedor de la anfitriona Serena. La ubicación es considerada excelente, a pocos minutos a pie del centro histórico y con aparcamiento privado, lo que facilita las visitas a Lucca y sus alrededores. Las habitaciones son amplias y cómodas, y el desayuno es abundante y satisfactorio. Algunos viajeros mencionan ruido de tráfico durante el día, aunque por la noche predomina la tranquilidad. El préstamo gratuito de bicicletas es un valor añadido apreciado. En conjunto, la villa es ideal para quienes buscan comodidad y fácil acceso al centro.