Nos alojamos dos noches en la habitación esmeralda, cuenta con una ducha fabulosa, un baño y una habitación espaciosos y extremadamente limpios con una calificación máxima. Calefacción excelente. También hay un minibar con dos botellas de agua en su interior y lo necesario para preparar té. En cuanto al desayuno, todo es perfecto, encontrarás deliciosos dulces caseros, varios tipos de galletas, cereales, yogur, jugos, té y bebidas a base de café. También se puede tomar un desayuno salado con huevos duros, tostadas, varios embutidos y queso. Los anfitriones son muy amables y serviciales, también nos indicaron varios lugares para visitar en los alrededores. Pasamos un tiempo muy agradable, un fin de semana relajante (la hermosa ducha ayudó), en un tranquilo pueblito. Lo recomiendo absolutamente.

Me alojé con mi esposa y mi hijo de 21 meses. Fue una experiencia maravillosa. La estructura es impresionante, muy limpia y equipada con todas las comodidades. Cortesía, simpatía y gran amabilidad de los propietarios. ¡Sin duda volveremos!