Las reseñas destacan la limpieza impecable y el estilo moderno del alojamiento. Los huéspedes aprecian la ubicación sobre una colina tranquila cerca de San Teodoro, con fáciles conexiones a las playas. El panorama es uno de los principales atractivos. Catia, la anfitriona, recibe elogios por su amabilidad y atención personalizada. El desayuno es variado y abundante. El lugar es considerado ideal para explorar la zona y relajarse. No se señalan inconvenientes importantes en los comentarios.