Las opiniones destacan la tranquilidad del entorno y la calidez de los anfitriones Giovanni y Bianca, quienes hacen sentir a los huéspedes como en casa. La ubicación en medio de la naturaleza y la proximidad a las playas son valoradas positivamente. El desayuno es abundante y se elabora con productos locales, siendo un punto fuerte de la experiencia. Las instalaciones son limpias, modernas y decoradas con mucho gusto, y la presencia de animales crea un ambiente amigable. Se menciona que la última parte del acceso es por camino de tierra y que algunas habitaciones tienen baño exterior o confort básico. Ideal para quienes buscan relajación y autenticidad en un entorno rural y acogedor.