¡Estructura pequeña y acogedora! ¡Hermoso jardín y habitación bien cuidada y limpia! Desayuno con productos caseros muy buenos, ¡pero falta la parte salada! Gerente muy acogedor y servicial. ¡Volveré!

Nos alojamos durante tres noches en esta propiedad muy elegante con un jardín maravilloso y habitaciones cómodas donde no faltaba nada. El desayuno se sirve en el jardín con muchas delicias preparadas todos los días por la propietaria Maria Antonietta, que incluye pasteles, muffins, galletas, cruasanes, panqueques, etc., fruta fresca y de kilómetro cero. Incluso se sirven platos salados a pedido y cada solicitud se cumple de inmediato. En resumen, te sientes como en casa. Lo pasamos genial y definitivamente volveremos.