Los viajeros destacan la cálida acogida de la anfitriona Giovanna, muy atenta y amable. Las instalaciones se valoran por su limpieza, comodidad y excelente relación calidad-precio. El desayuno, abundante y a menudo con productos caseros, es uno de los aspectos más apreciados. La ubicación es tranquila y pintoresca, en un pequeño pueblo cercano a varios destinos turísticos del norte de Cerdeña. También se menciona la tranquilidad del lugar y unas vistas espectaculares.