Las opiniones destacan la hospitalidad y amabilidad de los anfitriones, Tommaso y Paola, así como su constante disposición a ayudar y recomendar lugares de interés. La finca es apreciada por su encanto, las vistas panorámicas, la piscina y la tranquilidad del entorno. Los apartamentos resultan amplios, bien cuidados y limpios. La ubicación es tranquila pero cercana a playas y ciudades históricas como Pesaro y Fano. Se menciona que podría ser útil contar con aire acondicionado en los días más calurosos. Es un sitio muy recomendable para quienes buscan descanso y contacto genuino con los anfitriones.