Las opiniones destacan la cálida y familiar acogida por parte de Cristina, siempre atenta y disponible a las necesidades de los huéspedes. La limpieza y el cuidado de las habitaciones son puntos muy valorados, al igual que el desayuno, abundante y de calidad, con productos locales o caseros. La ubicación resulta conveniente tanto para acceder al centro como a las pistas de esquí, y muchos mencionan las bonitas vistas. El ambiente es tranquilo y agradable, con una atención especial a quienes viajan con mascotas. En resumen, es un alojamiento confortable y agradable, ideal tanto para vacaciones relajantes como para visitas rápidas.