Las reseñas destacan la tranquilidad y belleza del lugar, rodeado de viñedos y con vistas panorámicas espectaculares. Los apartamentos son limpios, equipados y cómodos, aunque de mobiliario sencillo. Los viajeros valoran mucho la piscina, los espacios exteriores y la buena disposición para recibir mascotas, con servicios pensados especialmente para ellas. Los anfitriones, Monica y Alberto, son elogiados por su amabilidad y por los útiles consejos sobre la zona. La ubicación es conveniente para explorar pueblos y paisajes cercanos. Se mencionan, en menor medida, la sencillez del mobiliario o el precio algo elevado, pero la experiencia general es muy positiva para quienes buscan relajarse en plena naturaleza.