Los huéspedes valoran la limpieza, el ambiente moderno y la buena ubicación cerca del centro y de tiendas. El acceso es sencillo y el anfitrión está muy disponible por mensajería. Las habitaciones y apartamentos cuentan con todo lo necesario y detalles como kits de cortesía. Aunque el check-in digital puede ser algo complicado para algunos, la comunicación con el anfitrión es excelente. En general, una opción muy recomendable para alojarse en Milán, tanto por su comodidad como por su relación calidad-precio.