Las opiniones destacan la amabilidad y disponibilidad del anfitrión. La ubicación es otro punto fuerte, ya que está cerca del metro y en una zona tranquila y bien servida. Las habitaciones son cómodas y limpias, aunque algunos viajeros consideran que la limpieza podría mejorar. El desayuno suele recibir comentarios positivos, pero algunos huéspedes lo encontraron básico. En general, es un alojamiento con buena relación calidad-precio, ideal para estancias tanto de trabajo como de ocio en Roma.