Las opiniones destacan principalmente la ubicación céntrica del alojamiento, en pleno casco antiguo de Bari, lo que facilita la visita a la ciudad caminando. Las habitaciones se describen limpias, renovadas y bien equipadas, aunque en algunos casos algo pequeñas pero confortables. Los anfitriones reciben elogios por su amabilidad y disposición. Algunos huéspedes mencionan la ausencia de ascensor y la necesidad de utilizar un aparcamiento público de pago cerca. El desayuno suele ofrecerse en una cafetería asociada. En general, es una opción recomendable para quienes quieran alojarse en el corazón de Bari.