Los huéspedes destacan especialmente la ubicación céntrica del alojamiento, excelente para recorrer Nápoles y muy cerca de la estación de metro. Las habitaciones son limpias y cómodas, y el propietario, Roberto, es valorado por su amabilidad y disponibilidad. El desayuno en la cafetería cercana recibe buenas referencias. También resalta la buena relación calidad-precio. Como pequeña desventaja, algunos mencionan la presencia de escaleras para acceder a las habitaciones.