Los huéspedes valoran especialmente la amabilidad y hospitalidad de los anfitriones, destacando a la señora Anna por su trato cordial y atento. Las habitaciones y los baños son amplios y muy limpios, con todos los detalles cuidados. La ubicación es céntrica y tranquila, cerca de tiendas y atracciones, lo que facilita desplazarse a pie. El desayuno es abundante y variado, con tartas caseras muy apreciadas. El alojamiento ofrece una excelente relación calidad-precio y un ambiente hogareño.