Los viajeros destacan la limpieza impecable del alojamiento, su ubicación tranquila rodeada de naturaleza y las hermosas vistas al exterior. Las habitaciones son grandes, modernas y muy cuidadas. El propietario, Nevio, recibe excelentes comentarios por su amabilidad, disponibilidad y buenos consejos sobre la zona. El desayuno, de estilo italiano y a menudo con pasteles caseros, es satisfactorio, aunque algún huésped sugiere mayor variedad. Es un alojamiento ideal como base para recorrer la región y disfrutar de paz y autenticidad, con una excelente relación calidad-precio.