Las opiniones destacan la cálida bienvenida y la atención del anfitrión, Paolo, quien recibe elogios por su amabilidad y conocimientos sobre la zona. El alojamiento es especialmente original por su temática literaria: las habitaciones están decoradas con esmero y el ambiente es muy acogedor y limpio. La localización es uno de los puntos fuertes, cerca de la estación y del centro, facilitando los desplazamientos a pie y el acceso a los principales lugares de interés. Se valoran positivamente los detalles como el jardín interno y la abundante limpieza. Algunos viajeros mencionan que las habitaciones no tienen aire acondicionado ni televisión, pero hay ventiladores disponibles y la tranquilidad del lugar compensa. El desayuno, cuando se ofrece, suele gustar mucho, aunque algunos huéspedes prefieren tomarlo en cafeterías cercanas. En suma, es una opción ideal para quienes buscan un ambiente original y una experiencia auténtica.