Los viajeros valoran la limpieza y la sencillez de las habitaciones, así como la amabilidad del personal y la buena calidad del restaurante. Las habitaciones son amplias, cada una con un tema diferente y bien equipadas, aunque la televisión puede resultar algo pequeña. No se sirve desayuno, pero ofrecen recomendaciones cercanas. Es una opción adecuada para escapadas románticas y el restaurante destaca por sus vinos y cocina. Buena relación calidad-precio.