Los viajeros destacan la limpieza impecable, la atención amable y profesional de los anfitriones y la estructura moderna y bien cuidada. El desayuno suele ser abundante, aunque en ocasiones se compone principalmente de productos envasados. La ubicación permite un acceso cómodo a la estación de tren de Rho, aunque está a unos veinte minutos a pie. Se menciona con frecuencia la buena relación calidad-precio y la tranquilidad del lugar, lo que hace que la experiencia general sea muy satisfactoria.