Los huéspedes valoran especialmente la limpieza, el ambiente acogedor y la amabilidad de la propietaria, Barbara, quien está siempre disponible para ayudar y hacer que los visitantes se sientan como en casa. El apartamento es cómodo, luminoso y bien equipado, con una ubicación conveniente cerca de la estación Porta Susa y el metro. Destacan el desayuno con pasteles caseros y la posibilidad de probar productos de cosmética natural. El entorno es tranquilo y residencial, ideal tanto para familias como para viajeros de negocios. Las críticas son mínimas y se centran en pequeños detalles. En general, es una opción recomendada para visitar Turín.







