Las reseñas destacan la buena ubicación del alojamiento, cerca del centro y de la estación, en una zona tranquila. Las habitaciones se consideran espaciosas y cómodas, aunque se mencionan pequeños aspectos a mejorar. La limpieza es valorada positivamente. El trato de la anfitriona, Anna Maria, es especialmente elogiado por su cortesía y disponibilidad. El desayuno, abundante y con productos locales, recibe buenas opiniones. También se menciona la disponibilidad de Wi-Fi. En general, los huéspedes recomiendan el alojamiento, aunque sugieren pequeñas mejoras en detalles como las almohadas.