Las opiniones resaltan principalmente las vistas impresionantes y la tranquilidad de la ubicación en la colina. Los huéspedes valoran mucho la limpieza de las habitaciones y el hecho de que la estructura es nueva y cuidada. La hospitalidad de Daniela y su familia es descrita como excelente, haciendo sentir a los visitantes como en casa. El desayuno, abundante y con pasteles caseros, es otro punto fuerte. La cercanía al mar permite disfrutar tanto del relax como del acceso fácil a la playa. La relación calidad-precio recibe valoraciones muy positivas.