Alojamiento: 10 |
Limpieza: 10 |
Encargado: 10 |
Ubicación del alojamiento: 10 |
Calidad/precio: 10
La estructura y su digno entorno natural nos parecieron tan especiales y acogedores que nos llevaron a regresar más de una vez durante el año. Creemos que las granjas de piedra tan bien mantenidas, que se encuentran en tales contextos, no son muy frecuentes en el campo o en la montaña, y por lo tanto valen más de una experiencia. Cada vez pudimos apreciar que alojarse allí se traducía en un cumplido casi afectuoso, además de ser una respuesta ideal a las expectativas. Además, nos gustaron: la exquisita amabilidad de los propietarios, la funcionalidad y el calor de la casa de piedra, el paisaje aún intacto y, por último, la frescura de espíritu de la gente local. A continuación, algunos versos - silenciosos y fuertes - de Emily Dickinson para representar con unos pocos toques magistrales el largo y cambiante encanto de este lugar. "La luz de la Mañana - donde reside el Rocío - La luz del Mediodía - destinada al Trigo - La luz de la tarde - para las flores - Y para las cerezas silvestres - la luz del Atardecer!" Emily Dickinson. Así que, a cada hora, una luz y un encantamiento: el rocío, el heno, las flores, las cerezas silvestres. Y siempre a cada hora espacios, montañas, criaturas esquivas, piedras, viento, bosques, rostros suaves, tierra intensa que tiene los aromas de la naturaleza más orgullosa. Y del pasado del hombre aquí tan presente, tan silencioso y fuerte que deja aturdido.
se ha alojado del 16/07/2013 al 28/07/2013