La estructura se encuentra en el primer piso de un antiguo edificio en la zona central de Catania. Es nueva, está muy bien mantenida y muy limpia. Las chicas que nos recibieron fueron muy amables y serviciales, permitiéndonos dejar nuestras mochilas y ayudándome a resolver un problema que había tenido en la calle. En el interior hay una pequeña cocina, una máquina de café y aperitivos siempre disponibles, además, para el desayuno, nos dieron bonos para usar en un bar cercano bien surtido. Enfrente, se accede al hermoso parque Bellini y caminando unos metros más te encuentras en Via Etnea, la calle principal desde donde puedes llegar fácilmente a la parada de metro y a las paradas de autobús hacia el aeropuerto (parada de Stesicoro). ¡Muy recomendado!