Los viajeros resaltan la ubicación tranquila de la propiedad, con vistas impresionantes al mar y un entorno rural encantador. La casa está completamente renovada, combina lo rústico con lo moderno, y está muy limpia y bien equipada. El trato del personal y de los propietarios, especialmente de Samantha, es muy valorado. La piscina con vistas es uno de los aspectos más destacados. Se recomienda coche para explorar los alrededores. En resumen, una experiencia muy positiva y relajante.