Con otras dos familias nos alojamos en La Zagara, una hermosa estructura, cuidada, limpia, acogedora y ubicada en un lugar estratégico, justo en la calle principal junto a la Catedral de San Pietro y frente al Palazzo della Cultura. Lo que marcó la diferencia fue la amabilidad y disponibilidad del gerente. Daniele, de hecho, nos dio muchos consejos útiles y valiosos que nos permitieron comer muy bien en los distintos locales y organizar nuestros desplazamientos de forma óptima durante un período típicamente concurrido como Ferragosto.