En el corazón de Trevico, el municipio más elevado de Irpinia y lugar natal del director Ettore Scola, se encuentra el Palacio Petrilli, una residencia histórica que data de 1300, hábilmente restaurada para mantener su encanto original. Entre las características más fascinantes, dentro del palacio hay antiguas grutas que se pueden visitar, donde brotan estanques naturales alimentados por aguas termales, un lugar suspendido en el tiempo que narra la milenaria historia de estas tierras.

Desde las alturas de Trevico, la vista abarca el valle del Ufita, llegando a vislumbrar los perfiles del Mar Tirreno y del Adriático. Un paisaje que también cautivó al poeta Horacio, quien se alojó aquí durante uno de sus viajes. Quien decide quedarse en el Palacio Petrilli no solo encuentra hospitalidad, sino también la oportunidad de experimentar el territorio a través de relatos, tradiciones y maravillas arquitectónicas que cuidamos con pasión y el deseo de compartirlas.