Dentro de un pequeño pueblo del siglo XX, el Borgo Lungofiume se destaca no solo por su maravillosa vista al río, sino también por el uso de materiales reciclados, que permiten reutilizar objetos y muebles antiguos. El techo ha sido dejado con vigas a la vista para darle un toque rústico a esta moderna renovación, mientras que los espacios son luminosos y decorados con buen gusto.

Ubicada en el tercer piso, la Suite está compuesta por una amplia sala de estar con sofá cama, una zona de desayuno con una gran mesa, una habitación doble y un baño con ventana muy espacioso, equipado con ducha y bañera para una total relajación. Además, cuenta con aire acondicionado para el verano y una estufa para calentar los fríos días de invierno.

Ideal para estancias cortas y largas, tanto para vacaciones como para aquellos que viajan por motivos laborales. Además, tenemos otras dos habitaciones con baño privado, que dan al río ofreciendo una magnífica vista a las montañas.