Entre las colinas, rodeado de viñedos, olivos y aromas del campo, se encuentra nuestro agroturismo: un lugar donde la naturaleza marca el ritmo y todo tiene un sabor más auténtico. Aquí se come bien, se respira profundamente y se vive con sencillez.

A pocos pasos de las habitaciones puedes pasear por las colinas, escuchar el silencio entre los árboles o perderte en los colores de un atardecer impresionante, incluso acompañado de tu amigo de cuatro patas.

Las ocho habitaciones son acogedoras, luminosas y con vistas al valle: el lugar perfecto para desconectar y reencontrarte con lo esencial.

Por la noche puedes cenar con nosotros, en el agroturismo junto a las habitaciones, con platos que cuentan la historia del territorio y elaborados con ingredientes que provienen directamente de nuestra tierra. Y durante las noches de verano, la cena se enriquece con la magia de la música, luces suaves, cerveza artesanal y un cielo estrellado.

Cada mañana te despertamos con un desayuno casero, entre aromas de pan recién hecho, dulces naturales, miel de nuestras abejas y productos frescos de nuestra finca.

Ya sea que vengas a probar una de nuestras cervezas, a compartir una charla con amigos alrededor de la mesa, a descubrir nuestro mundo o simplemente a relajarte entre las colinas, aquí siempre hay espacio para quienes aman las cosas auténticas.