Sumergida en la campiña salentina, a pocos minutos de las aguas cristalinas de Gallipoli y Lido Conchiglie, Masseria La Maestà es una residencia histórica de alta gama que data de 1511, restaurada con gran esmero y respeto por la arquitectura original. Los espacios conservan el encanto de las antiguas masserías salentinas, enriquecidos con comodidades modernas y detalles de calidad que la convierten en un alojamiento exclusivo.

La propiedad se extiende por aproximadamente 10 hectáreas, con amplios espacios verdes, olivares, viñedos y un jardín de tres hectáreas embellecido con alrededor de 300 árboles frutales, algunos de ellos antiguos y raros. Los huéspedes pueden disfrutar de largas caminatas entre los senderos arbolados, relajarse en los gazebos o saborear los productos de la massería durante los desayunos y cenas al aire libre. El vino y el aceite se producen en el lugar según métodos tradicionales: el renombrado rosado DOC Alezio y el aceite de oliva virgen extra DOP obtenido de aceitunas recolectadas a mano.

Los apartamentos, decorados con muebles antiguos de familia, ofrecen privacidad y encanto. La suite "Il Palmento", con techos de bóveda y suelos de piedra, alberga hasta cuatro personas en un amplio espacio abierto de 55 m². La Gran Suite "Torre delle Monache", con vistas a la capilla privada, se encuentra en la parte más antigua de la massería y ofrece un ambiente acogedor, con chimeneas históricas y una terraza que se abre hacia el mar. El Apartamento "Reale", de 250 m², es una residencia prestigiosa con dos habitaciones, dos baños y espacios amplios, ideales para familias o pequeños grupos.

Cada alojamiento está equipado con cocina completa, ropa de cama, calefacción, aire acondicionado y ventiladores de techo. La estructura también acepta mascotas, respetando la tranquilidad y a los demás huéspedes.

Ideal para familias y parejas que buscan relajación, naturaleza y autenticidad, Masseria La Maestà combina el silencio del campo con la comodidad de estar cerca de las localidades más vibrantes y encantadoras del Salento, como Lecce, Galatina, Nardò y Otranto. Una estancia que evoca tierra, historia y belleza.