Via Flacca, Snc - GAETA (LT)
Si deseas renovarte en la tranquilidad de la naturaleza, respirando el aroma del mar y dejándote llevar por sus sonidos, esta pequeña casa es el refugio perfecto para ti. Rodeada de olivos y árboles frutales, “A casa di Eta” se ubica en una colina con vistas panorámicas a las islas Pontinas, Ischia y el promontorio del Circeo, a medio camino entre Gaeta y Sperlonga. El silencio está asegurado incluso en los meses más concurridos, y la impresionante vista acompaña cada instante del día.

El estudio, independiente y decorado con esmero, está diseñado para dos personas. Con sus 22 m², ofrece todo lo necesario para una estancia cómoda y relajante: cama matrimonial estándar, kitchenette equipada, baño con ducha, ventanas dobles con mosquiteros, cortinas opacas, aire acondicionado frío/calor, TV LCD, y ropa de cama y baño con cambio semanal. En el exterior, un pequeño balcón privado con vistas permite comer al aire libre y disfrutar de la barbacoa, mientras que una terraza solárium adicional y un jardín común ofrecen más espacios para relajarse en medio de la naturaleza.

La ubicación, a 300 metros en línea recta del mar, permite acceder en pocos minutos a algunas de las playas más hermosas de la costa del Lacio, como Arenauta, los 300 Escalones, Sant’Agostino y Serapo. Sin embargo, debido a la presencia de una pendiente empinada, es imprescindible contar con un coche o una moto, además de tener buena habilidad para conducir en subida. Los huéspedes pueden aparcar bajo una pérgola de madera, justo al lado del estudio, y reciben las llaves directamente de los propietarios para una total autonomía.

La casa no es apta para niños pequeños, ni se permiten mascotas debido a la presencia de dos perros en la propiedad. El agua del grifo es potable, y los productos de temporada del huerto y del frutal están a disposición de los huéspedes, que así pueden disfrutar de los auténticos sabores de la tierra.

Un pequeño rincón del mundo donde la naturaleza, la privacidad y la sencillez se combinan para ofrecer una pausa auténtica y revitalizante.
*Declaradas por el encargado