Casa de finales del siglo XIX, siempre ha pertenecido a la misma familia y ha sido recientemente renovada, conservando la originalidad de los espacios con vigas de madera a la vista y paredes de piedra y roca.

Rodeada de la exuberante vegetación de las colinas morenicas y los viñedos de Lugana, ofrece a los huéspedes unas vacaciones centradas en el descanso y la serenidad. El amplio jardín con solárium les brindará momentos de tranquilidad y diversión, según sus preferencias.

Podrán disfrutar de la emoción de pasear a pie o en bicicleta inmersos en la naturaleza, así como el placer de un abundante desayuno rodeados por el verde de un jardín florecido.

- Estacionamiento privado.

- Entrada independiente a la vivienda de los propietarios.

- Conexión a internet wi-fi gratuita.

- Limpieza diaria de las habitaciones y los baños.

- Cambio de sábanas cada 3 días.

- Solárium.

- Piscina.

Se habla inglés.