Surge del sueño de una pareja joven pero con ideas claras, Sandro y Sandra Giuliodori, quienes han revitalizado una antigua casa de campo ubicada en las suaves colinas de las Marcas.

Sandro y Sandra han dedicado su tiempo a este proyecto con alegría y gran pasión, encargándose personalmente de la renovación y la decoración de todos los espacios que conforman el agriturismo. Así han creado un lugar que se caracteriza por su calidez, sobriedad y elegancia, sensaciones que se pueden percibir tanto en el comedor como en las habitaciones, todas muy cuidadas y al mismo tiempo extremadamente funcionales.

Un relajante paisaje sirve de telón de fondo a esta ubicación, pensada para estancias enfocadas en el descanso, la buena comida y esa hospitalidad que hace sentir cómodo al visitante desde el primer momento.

Casale San Filippo también ofrece la oportunidad de degustar algunos productos que son el fruto del ganado y los cultivos que Sandro y Sandra gestionan con destreza, como platos elaborados con jabalí, verduras frescas, mermeladas, su magnífico aceite y muchas otras delicias que harán las delicias de quienes deseen comer de manera saludable, prestando atención a las especialidades locales, como el renombrado Rosso Piceno.

Además de la tranquilidad y la buena mesa, el visitante tendrá la oportunidad de realizar interesantes excursiones de carácter cultural, religioso y paisajístico. De hecho, Casale San Filippo se encuentra a pocos minutos en coche de Recanati, la patria de Leopardi, de Loreto, famoso centro de espiritualidad, y de la costa del Conero, joya de nuestro Adriático.

Quien venga a este rincón de las Marcas para relajarse y regenerarse quedará gratamente impresionado por lo que Casale San Filippo puede ofrecer, incluso en lo que respecta a actividades al aire libre, y llevará consigo el recuerdo de sensaciones positivas que podrá revivir.