Un pequeño y completamente nuevo B&B está situado en las cercanías de la Ciudad Blanca, rodeado de un olivar con vistas al mar. Solo hay dos habitaciones en la lamia de un antiguo trullo saraceno. Las habitaciones están diseñadas para la comodidad y relajación de los huéspedes: cada una tiene un espacio privado al aire libre donde, si se solicita, se sirve el desayuno a la carta. La cocina al aire libre, equipada con una barbacoa, está disponible para los huéspedes (se requiere reserva). En el amplio espacio exterior, se sirven bebidas frías todos los días y nunca falta una copa de vino en la hora del aperitivo.