El encantador Bed and Breakfast está situado en el centro histórico de Montecarlo, un pequeño y encantador pueblo medieval, a 20 km de Lucca, entre el verde de los olivos y los coloridos viñedos, a lo largo de la "Ruta del Vino y el Aceite".

En un edificio de finales del 1600, en un ambiente cálido y familiar, típico de la auténtica Toscana, se atiende con cordialidad y simpatía.

Las flores caracterizan las habitaciones, con camas de hierro forjado, techos con vigas, suelos de terracota y muebles toscanos tradicionales. Todas las habitaciones están equipadas con baño exclusivo, TV, teléfono, secador de pelo y ventilador de techo, calefacción, cama infantil (bajo petición). Toda la estructura está equipada con wifi gratuito. También puedes llevar a tus amigos de cuatro patas contigo en el camino y puedes regresar en cualquier momento de la noche.

Todas las mañanas se prepara un sabroso desayuno buffet, con una gran variedad de productos dulces y deliciosas tartas caseras. Bajo petición, desayuno salado y según las necesidades dietéticas específicas del huésped. Durante el día, el pequeño bar está disponible para aperitivos, platos de productos locales o una excelente copa de Montecarlo DOC. Por la noche, es posible cenar platos caseros, según las recetas tradicionales toscanas transmitidas por nuestras abuelas, en el patio, bajo los árboles en verano o alrededor de la chimenea en invierno.

Nuestras instalaciones son el lugar perfecto para parejas y familias que aman viajar y quieren sentirse como en casa, para reuniones y estancias de negocios, para curarse y regenerarse gracias a los balnearios cercanos, para construir deliciosos itinerarios enogastronómicos a través de los cuales descubrir tradiciones y culturas, piérdete entre eventos culturales y exposiciones, piérdete entre los sonidos y olores de los numerosos jardines de la zona.

El Bed and Breakfast se encuentra en una posición estratégica para visitar las diversas maravillas que ofrece la Toscana: desde las ciudades de arte más importantes del mundo como Lucca, Pisa y Florencia, hasta la sugerente costa de Versilia; desde las riquezas naturalistas de la Garfagnana hasta los hermosos pueblos medievales como Vinci, Certaldo, Volterra y San Gimignano.